Mantenimiento eléctrico preventivo para empresas: ¿por qué es importante?

El mantenimiento eléctrico preventivo es una práctica fundamental para cualquier empresa, ya que éstas dependen de sistemas eléctricos para su funcionamiento diario. Este tipo de mantenimiento se basa en detectar y solucionar problemas antes de que se conviertan en problemas mayores, es decir, prevenir en lugar de esperar a que ocurra un fallo en el sistema.

Las consecuencias de un fallo eléctrico pueden ser más o menos graves, pero siempre afectan a la productividad, por lo que plantear un plan de mantenimiento eléctrico es esencial y de vital importancia para la empresa. Mediante dicho mantenimiento se pueden detectar posibles fallos o anomalías de funcionamiento del equipamiento eléctrico.

El mantenimiento preventivo se basa en el establecimiento de una serie de puntos de control que son revisados periódicamente para reducir las probabilidades de que los equipos eléctricos presenten averías. Gracias a este mantenimiento, aunque no se elimina por completo la posibilidad de fallos, se limita de forma notable su aparición. Además, estas actuaciones preventivas contribuyen a alargar la vida útil del equipamiento eléctrico.

Definición y tipos

Como acabamos de comentar, el mantenimiento preventivo es el que se realiza a la parte eléctrica de un equipo o máquina para reducir su probabilidad de avería. Dicho mantenimiento es planificado y ejecutado para garantizar que no se produzcan fallos y disminuir las consecuencias de las averías. Son tareas rutinarias que se llevan a cabo independientemente del estado de funcionamiento actual del equipo.

El mantenimiento preventivo está basado en el tiempo o en el uso, por lo que se puede planificar con antelación. En función de su naturaleza encontramos diferentes tipos de mantenimiento eléctrico preventivo:

• Mantenimiento de detección de fallos. Se efectúa durante o después de una acción de mantenimiento correctivo. Por ejemplo, es el caso de un reemplazo de componentes de un equipo que todavía no han fallado, pero que se aprovecha a sustituir al mismo tiempo que se reemplaza el elemento defectuoso.
• Mantenimiento apoyado en la tecnología. Se basa en un seguimiento en tiempo real mediante la monitorización del estado del sistema y de todos sus componentes. La reparación se llevaría a cabo antes de que se produjera el fallo en el sistema eléctrico.
• Mantenimiento basado en el tiempo. Se lleva a cabo de forma periódica, independientemente del estado del equipo, mediante la programación del servicio de mantenimiento.
• Mantenimiento basado en riesgos. Cuando un componente del sistema eléctrico está aparentemente desgastado, el técnico puede repararlo o verificar su estado de forma periódica a intervalos regulares.

La característica común de todos estos tipos de mantenimiento preventivo es que se realizan siempre antes de que surjan problemas en el sistema eléctrico.

Beneficios del mantenimiento eléctrico preventivo

Los beneficios de llevar a cabo un correcto mantenimiento eléctrico preventivo son muchos y diversos. Veamos a continuación algunos de los más importantes:

• Reducción de costes. Este mantenimiento puede parecer una inversión costosa en un principio, pero a largo plazo, reduce los costes de manera significativa. La detección temprana de problemas eléctricos permite repararlos antes de que se conviertan en problemas mayores que podrían requerir una reparación más costosa. Además, un mantenimiento preventivo regular aumenta la vida útil de los equipos eléctricos, lo que significa que no tendremos que reemplazarlos con tanta frecuencia.

• Mantenimiento de la productividad. Las empresas dependen de sistemas eléctricos para funcionar de manera eficiente. Un fallo eléctrico puede tener consecuencias significativas en la producción, incluyendo tiempos de inactividad prolongados, pérdida de productividad y, en casos extremos, incluso daños irreparables a los equipos. El mantenimiento preventivo garantiza que los sistemas eléctricos se mantengan en buen estado de funcionamiento y que las reparaciones se realicen antes de que se conviertan en problemas que afecten a la producción.

• Cumplimiento de normas y regulaciones. Las empresas están sujetas a normas y regulaciones que establecen requisitos específicos para la seguridad eléctrica. El mantenimiento eléctrico preventivo es una forma de cumplir con estos requisitos al garantizar que los sistemas eléctricos sean seguros y cumplan con las regulaciones y normas aplicables.

• Mejora de la seguridad. La seguridad es una preocupación importante en cualquier lugar de trabajo, y los sistemas eléctricos representan un riesgo significativo de incendios y otros peligros si no se mantienen adecuadamente. El mantenimiento preventivo garantiza que los sistemas eléctricos sean seguros y que los problemas eléctricos se resuelvan antes de que se conviertan en riesgos de seguridad para los empleados.

• Mejora de la eficiencia energética. El mantenimiento preventivo también puede mejorar la eficiencia energética de los sistemas eléctricos al garantizar que los equipos estén funcionando de manera óptima. Los sistemas eléctricos mal mantenidos pueden consumir más energía de la necesaria, lo que puede aumentar los costes de energía para la empresa. El mantenimiento preventivo garantiza que los sistemas eléctricos sean eficientes en cuanto al consumo de energía y, por lo tanto, reduzcan los costes de energía.

• Planificación de presupuesto. Este mantenimiento permite a las empresas planificar su presupuesto con anticipación al programar el mantenimiento regular y evitar gastos imprevistos. Esto puede ayudar a los negocios a tener una mejor gestión financiera y evitar el estrés financiero que puede resultar de reparaciones no planificadas y costosas.

• Mejora de la confiabilidad del equipo. El mantenimiento preventivo también puede mejorar la confiabilidad del equipo al garantizar que se realicen inspecciones y reparaciones programadas en el equipo antes de que se produzcan fallos o averías importantes.

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