Etiqueta energética de los electrodomésticos: qué es y cómo interpretarla
7 mayo, 2025
¿Alguna vez te has preguntado cuánto consume realmente un frigorífico industrial o si la lavadora que usas en tu local es eficiente? La clasificación energética ayuda a las pequeñas y medianas empresas a reducir costes, ahorrar energía, y contribuir a un modelo más sostenible. Si estás valorando renovar equipos en tu negocio o simplemente quieres entender cómo afecta el consumo energético a tus facturas, este blog te interesa.
Hoy en día, ser consciente del consumo energético no es solo una cuestión de ahorro, sino también de responsabilidad corporativa. En este blog, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre la clasificación energética de los electrodomésticos: cómo leerla, por qué importa en una pyme y cómo te ayuda a tomar decisiones más sostenibles y rentables.

Nuevas etiquetas en la clasificación energética de los electrodomésticos
Hasta hace unos años, el etiquetado energético iba desde la A+++ hasta la D, lo cual generaba confusión, casi todos los electrodomésticos parecían eficientes, aunque no lo fueran realmente. Para solucionarlo, en 2021 entró en vigor una nueva normativa europea que reformula completamente la clasificación energética.
Ahora, la escala va de la A (más eficiente) a la G (menos eficiente), eliminando los signos “+” facilitando la comparación entre productos, reduciendo notablemente la confusión. Este cambio busca ser más riguroso y facilitar la toma de decisiones, sobre todo en negocios donde se busca optimiza costes.
Además, estas nuevas etiquetas incluyen elementos adicionales muy útiles:
- Código QR: al escanearlo con el móvil puedes acceder a la base de datos oficial de la Unión Europea, con información técnica más detallada.
- Consumo de energía por uso o año, según el tipo de electrodoméstico.
- Pictogramas visuales que resumen características clave como capacidad, ruido, ciclos, etc.
La nueva escala está diseñada para durar al menos 10 años, dejando margen para que los productos evolucionen y mejoren su rendimiento sin saturar de nuevo la parte alta de la tabla.
Esto responde a la necesidad de transparencia y a un contexto empresarial en el que cada gasto cuenta y donde la sostenibilidad empieza a ser un valor diferencial también para las pymes.
¿Cómo leerlas etiquetas energéticas?
Leer una etiqueta energética no debería ser complicado, y con la nueva versión, es incluso más intuitivo. Aun así, es importante conocer qué significa cada apartado.
Elementos comunes en todas las etiquetas:
- Escala de eficiencia energética (A a G): representada con barras de colores, del verde (eficiente) al rojo (ineficiente).
- Clase energética: la letra que indica la eficiencia general del producto.
- Consumo energético específico: en kWh por año, por ciclo o por cada 100 horas (según el aparato).
- Datos adicionales: como nivel de ruido, capacidad, volumen, duración de
Entender estos elementos te permite comparar modelos similares y priorizar aquellos que combinan eficiencia, funcionalidad y sostenibilidad.
Desde Novaluz te damos un consejo: No te quedes solo con la letra. Dos electrodomésticos con la misma clasificación energética pueden tener diferencias de consumo si tienen distinta capacidad o tecnología, la clave está en leer también el número de kWh.
Etiqueta energética según el electrodoméstico
Aunque la estructura general de la etiqueta energética es similar en todos los productos, cada tipo de electrodoméstico incluye especificaciones concretas que pueden marcar una gran diferencia en el consumo y los costes energéticos de tu negocio.
Entenderlas te permitirá optimizar los recursos, reducir gastos y tomar decisiones más sostenibles, especialmente si gestionas un pequeño comercio, una oficina o un local de restauración.
Frigoríficos
En la clasificación energética de los frigoríficos la etiqueta incluye :
- Consumo anual de energía en kWh.
- Capacidad del compartimento refrigerador y congelador (en litros).
- Nivel de ruido, expresado en decibelios y clasificado también con una letra (de A a D).
Un frigorífico con buena clasificación energética puede representar un ahorro significativo, ya que está encendido las 24 horas del día. Elegir un modelo A o B puede reducir drásticamente el consumo eléctrico de tu pyme frente a modelos de clase E o F.
Además, los modelos más nuevos incluyen tecnologías como el compresor inverter o el modo eco, que regulan el uso de energía de forma inteligente.
Lavadoras
Las nuevas etiquetas para lavadoras se centran en el ciclo ecológico de 40-60 °C, y muestran:
- Consumo energético por 100 ciclos.
- Capacidad máxima en kg de ropa.
- Consumo de agua por ciclo, en litros.
- Duración del ciclo ecológico.
- Nivel de ruido durante el centrifugado, con clasificación energética sonora.
Una lavadora eficiente puede significar menos consumo eléctrico y ahorro de agua, dos elementos clave en negocios con rotación diaria de ropa o textiles. Los modelos con sensores de carga ayudan a no desperdiciar recursos.
Algunas marcas ya incorporan sensores de carga automática y algoritmos que ajustan el ciclo según la cantidad y el tipo de ropa, optimizando así el uso de recursos.
Secadoras
En las secadoras, la eficiencia varía mucho según el tipo: condensación o bomba de calor. Las de bomba de calor son más caras, pero también mucho más eficientes.
La etiqueta muestra:
- Consumo por ciclo en kWh (normalmente para carga completa y media carga).
- Tipo de secadora (ventilada, bomba de calor, etc.).
- Duración del ciclo estándar.
- Nivel de ruido.
- Capacidad en kg.
Una secadora de clase A puede consumir hasta la mitad de energía que una de clase C. Aunque la inversión inicial es mayor, el ahorro a medio plazo compensa.
Además, estas secadoras generan menos calor residual, por lo que son más seguras y respetuosas con los tejidos.
Lavavajillas
Los lavavajillas actuales son cada vez más eficientes, tanto en consumo eléctrico como de agua.
La etiqueta energética incluye:
- Consumo de energía por 100 ciclos.
- Consumo de agua por ciclo.
- Duración del programa ECO.
- Capacidad en número de cubiertos.
- Nivel de ruido.
Un lavavajillas con buena clasificación energética puede ayudarte a ahorrar hasta 1.000 litros de agua al año respecto a lavar a mano, siempre que se use correctamente. Además, usar siempre el programa ECO puede reducir el gasto hasta en un respecto al uso estándar.
Aire acondicionado
En este caso, la etiqueta se adapta al tipo de aparato y su uso (frío/calor). Incluye:
- Clasificación energética para refrigeración y calefacción, si aplica.
- Consumo por temporada, en kWh.
- Nivel de ruido en interior y exterior.
- Capacidad frigorífica y calorífica (en kW).
- Clima de referencia (templado, cálido o frío).
El aire acondicionado, puede representar un gasto elevado en verano e invierno, por lo que una clasificación energética A o B puede marcar una gran diferencia en la factura eléctrica.
Modelos con detección de presencia, programación horaria o gestión por wifi permiten un control más inteligente del consumo, adaptándose al horario laboral y reduciendo gastos en temporadas de uso intensivo.
Televisores
Sí, los televisores también tienen su clasificación energética, aunque no todos lo saben. Esta muestra:
- Consumo en modo encendido por cada 1.000 horas.
- Consumo en modo HDR.
- Tamaño de pantalla en pulgadas.
- Resolución y tecnología de pantalla (LED, OLED, QLED…).
- Clase energética general.
Un televisor eficiente no solo consume menos, sino que también suele incorporar tecnología de apagado automático y sensores de brillo, que ajustan la imagen según la luz ambiental, optimizando su uso.
Conclusión
La clasificación energética de los electrodomésticos no solo impacta en el consumo eléctrico, sino también en tu bolsillo y en el planeta. Apostar por aparatos más eficientes es una decisión inteligente a largo plazo.
Ahora, con las nuevas etiquetas, interpretar esta información es más sencillo y útil que nunca. Cuanto mejor sea la clasificación, mayor será el ahorro y menor el impacto ambiental.
En Novaluz, te ayudamos a dar el siguiente paso hacia la eficiencia. Si necesitas optimizar el consumo energético de tu hogar o negocio, contacta con nosotros. Te asesoramos para que tomes decisiones que se noten, también en tu factura.
