¿La energía eléctrica es limpia o contaminante? Resuelve todas tus dudas
29 septiembre, 2023
Este interrogante se ha consolidado como motivo de debate en cuanto a la naturaleza de la energía eléctrica y el impacto que esta tiene en el medio ambiente. Por ello, ¿es realmente energía limpia o por el contrario favorece a un impacto ambiental negativo?
La energía eléctrica se ha configurado como una de las principales fuerzas que han impulsado el avance tecnológico, pero las consecuencias ambientales de su uso han estado durante largos periodo de tiempo en el punto de mira de la preocupación pública. Es aquí donde surge la pregunta que da título a este artículo: ¿la energía eléctrica es limpia o contaminante?
Desde Novaluz te traemos este blogpost en el que trataremos de dar respuesta a esta cuestión, proporcionándote determinados puntos clave que te ayudarán a consolidar tu propia opinión basada en la información y la reflexión. ¡No te lo pierdas!
¿A qué nos referimos con energía limpia dentro de la energía eléctrica?
Antes de entrar en detalle, aclararemos a qué se refiere cuando describimos una fuente de energía como limpia.
La energía limpia se refiere a aquellas fuentes de energía cuyo impacto ambiental fruto de su uso es mínimo en comparación con las fuentes tradicionales de generación energética. Estas fuentes de energía son consideradas limpias porque gran parte de estas durante su uso, no emiten grandes cantidades de agentes contaminantes que favorecen el cambio climático y la degradación del medio ambiente.
Además, este tipo de energías como la solar o la eólica, son sostenibles a largo plazo, ya que las fuentes a partir de las que se obtiene este tipo de energía son prácticamente inagotables y como hemos mencionado, apenas generan contaminantes atmosféricos.
¿Cuáles son las ventajas y las desventajas de la energía eléctrica?
La energía eléctrica ha ofrecido y ofrece una gran cantidad de ventajas que han permitido inmensos avances y desarrollos tecnológicos. Además, hay que destacar su eficiencia y versatilidad tanto en su transmisión como en su distribución. Junto a esto, se están produciendo adicionalmente mejoras en los sistemas de almacenamiento, favoreciendo así un control más eficaz de la oferta y demanda de esta energía eléctrica.
Por otra parte, no todo son beneficios, y es que la producción de energía eléctrica trae consigo también una serie de consecuencias negativas que veremos a continuación.
La aún vigente dependencia hacia los combustibles fósiles y la generación de residuos durante la producción de dispositivos eléctricos son dos factores que no debemos pasar por alto. A esto se le añade la construcción de grandes instalaciones e infraestructuras necesarias para la producción energética, que pueden traer consigo un impacto negativo en el medio ambiente.
¿Qué objetivo se debe perseguir? La respuesta: la sostenibilidad
En el debate que vincula limpieza y contaminación, la solución se encuentra en la incorporación de prácticas más sostenibles durante el proceso de generación de energía eléctrica.
Con el creciente aumento de la popularidad en el uso de energías renovables y la implantación de tecnologías más eficientes y limpias, se está favoreciendo a que el impacto que la producción energética tiene sobre el medio que la rodea, sea cada vez menor. Adicionalmente, a esto contribuye el continuo desarrollo tecnológico que está teniendo lugar actualmente y la creciente concienciación por parte de la población con este aspecto.
Sin embargo, sobre el consumidor también recae cierto protagonismo y responsabilidad en este debate. Que este escoja servicios y productos procedentes de fuentes energéticas sostenibles es clave para impulsar la demanda energética sostenible, y al mismo tiempo, incorporar prácticas energéticas más sostenibles y ecológicas por parte de las empresas.
Es por ello por lo que la educación y la concienciación respecto al impacto que nuestras actividades diarias tienen en el medio ambiente es fundamental si queremos experimentar un cambio positivo que busque el avance hacia un futuro más sostenible.
Entonces, ¿cuál es la respuesta a este interrogante?
Podemos llegar a la conclusión de que la pregunta que se plantea si la energía eléctrica es o no limpia, no posee una respuesta en concreto. Este hecho, depende de otros factores como la fuente a partir de la que se origina la energía eléctrica e incluso cómo se hace uso y se consume esta.
Sin embargo, si existe una respuesta evidente, y es que la transición hacia un futuro sostenible en el que se priorice el uso de energías limpias dependerá en gran medida de la adopción de prácticas sostenibles. Tanto por parte de los productores como de los consumidores, mediante un compromiso colectivo que busque la preservación y el cuidado del medio ambiente.
Si quieres conocer más consejos acerca de la eficiencia energética o estar a la última de las novedades del mercado eléctrico, te invitamos a que eches un vistazo a nuestro blog.
Por otra parte, si te surge cualquier duda o quieres hacernos alguna sugerencia, ¡contacta con nosotros! Desde Novaluz estaremos encantados de ayudarte.